Coble de Yorkshire
Publicado: Lun Oct 01, 2018 8:41 pm
El coble es una embarcación que durante el siglo XIX y principios del XX fue característica de las costas inglesas del noreste. Se empleaba, tanto a remo como a vela, para la pesca, el pilotaje y también, en ocasiones, como barco de recreo y para regatear. Estaba diseñado para ser botado y recogido con la popa mirando hacia la orilla aún con grandes olas y fuertes rompientes, y podía navegar largas distancias en mar abierto. Ceñía muy bien, y en manos de tripulantes experimentados era muy capaz de sobrevivir a una galerna.
Su casco de tingladillo presenta una forma muy compleja y curiosa, con fondo plano y altas bordas, con una roda curva ligeramente lanzada y una quilla que tan sólo llega hasta la mitad de la eslora de la embarcación, con dos carenotes que desde dicha mitad llegan hasta la popa, que tiene forma de herradura y se inclina formando un ángulo de 45º. El fondo plano y los citados carenotes facilitan su varado en playas poco profundas de arena; una ventaja en las costas donde operaba, en las que las amplias bahías y ensenadas brindaban poco refugio contra el clima tormentoso. El diseño contiene reminiscencias de influencia nórdica, aunque en su mayor parte muestra un origen holandés.
Los carpinteros de ribera locales construían los cobles a tingladillo sin el uso de planos, consiguiendo unas embarcaciones robustas y resistentes. Aunque los cobles tenían la reputación de ser peligrosos para navegar con una tripulación inexperta, en manos experimentadas podían moverse con seguridad y rapidez.
Su casco de tingladillo presenta una forma muy compleja y curiosa, con fondo plano y altas bordas, con una roda curva ligeramente lanzada y una quilla que tan sólo llega hasta la mitad de la eslora de la embarcación, con dos carenotes que desde dicha mitad llegan hasta la popa, que tiene forma de herradura y se inclina formando un ángulo de 45º. El fondo plano y los citados carenotes facilitan su varado en playas poco profundas de arena; una ventaja en las costas donde operaba, en las que las amplias bahías y ensenadas brindaban poco refugio contra el clima tormentoso. El diseño contiene reminiscencias de influencia nórdica, aunque en su mayor parte muestra un origen holandés.
Los carpinteros de ribera locales construían los cobles a tingladillo sin el uso de planos, consiguiendo unas embarcaciones robustas y resistentes. Aunque los cobles tenían la reputación de ser peligrosos para navegar con una tripulación inexperta, en manos experimentadas podían moverse con seguridad y rapidez.