El Comercio de Marsella.
Re: El Comercio de Marsella.
Gracias Ferrar, tu si que me has dejado sorprendido por tu interés por mi trabajo, pero la verdad yo no me veo tan bueno solo intento copiar lo mejor que se de lo que hay en los planos o libros, pero de todas las formas muy agradecido por tu interés en estos trabajos.
Saludos.
Saludos.
Re: El Comercio de Marsella.
El estornudo absorbe todas las funciones del alma. (Blaise Pascal).
Re: El Comercio de Marsella.
Chalupa pequeña.
Todo hombre tiene tres variedades de carácter: el que realmente tiene, el que aparenta y el que cree tener. Alphonse Karr).
Todo hombre tiene tres variedades de carácter: el que realmente tiene, el que aparenta y el que cree tener. Alphonse Karr).
Re: El Comercio de Marsella.
Los pilotos de la nave.
Cuando me dicen que soy demasiado viejo para hacer una cosa, procuro hacerla en seguida. ( Pablo Ruz Picasso).
Cuando me dicen que soy demasiado viejo para hacer una cosa, procuro hacerla en seguida. ( Pablo Ruz Picasso).
Re: El Comercio de Marsella.
Hola:
Sigo sorprendido (y aprendiendo), ¡¡¡no paras!!!.
Para las cuadernas y el bote, ¿que madera has usado?
un saludo
Sigo sorprendido (y aprendiendo), ¡¡¡no paras!!!.
Para las cuadernas y el bote, ¿que madera has usado?
un saludo
Re: El Comercio de Marsella.
Hola ferrar:
La madera es peral, de esta zona que da un color ligeramente claro.
La madera es peral, de esta zona que da un color ligeramente claro.
Re: El Comercio de Marsella.
Dios nos envían los manjares, y el demonio los cocineros. ( Thomas Deloney).
Re: El Comercio de Marsella.
No desees y serás el hombre más rico del mundo. ( Miguel de Cervantes.
Re: El Comercio de Marsella.
Hola, preciosa chalupa
un saludo
un saludo
Re: El Comercio de Marsella.
Sólo una vida vivida por los demás merece la pena ser vivida. ( Albert Einstein).
Re: El Comercio de Marsella.
Esta campana y el campanario lo he tenido que volver ha hacer, ya que el anterior lo he extraviado, seguro que cuando esté buscando otra cosa aparecerá.
Re: El Comercio de Marsella.
Las ideas deben recibirse como huéspedes: es decir, cordialmente, pero a condición de que no tiranicen al anfitrión. ( Alberto Moravia).